Autor: benemeritos.es
Categoría: Guardia Civil
En Melilla, las fuerzas de seguridad detuvieron al cabecilla de una red terrorista que operaba bajo las directrices de la violenta organización DAESH. Su principal cometido era captar mujeres para sus filas. Para ello utilizaba innovadores métodos de comunicación, utilizando grupos privados en la popular plataforma de comunicación WhatsApp. Allí, a través de un estrecho contacto, construía relaciones con las potenciales reclutas, ganándose su confianza y lealtad. Este sofisticado proceso de captación se centraba en la creación de fuertes vínculos emocionales, que posteriormente se utilizaban para manipular y coaccionar a estas mujeres para que se unieran a la organización. Estas acciones demuestran la diversidad de las estrategias de captación utilizadas por DAESH.
El segundo detenido, originario de Barcelona, tenía un papel clave en el proceso de reclutamiento de DAESH: era responsable de editar y distribuir material propagandístico para persuadir y reclutar a nuevos miembros para esta organización terrorista. La forma en que comunicaba sus mensajes era sofisticada y estaba diseñada para atraer al mayor número de personas posible. Una tercera persona detenida en Cataluña, profundamente inmersa en la ideología yihadista, glorificaba activamente los actos de martirio. Este planteamiento suponía un grave riesgo, ya que podía inspirar a otros a realizar acciones extremas similares. Sus acciones suponían un riesgo potencial, debido al riesgo de escalada de violencia y de posibles acciones terroristas.
Una juez del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional ha ordenado el ingreso en prisión sin posibilidad de fianza de cuatro yihadistas sospechosos de tener vínculos con el terrorismo. La detención se produjo el pasado martes, en el marco de una operación antiterrorista dirigida por la fiscal de la Audiencia Nacional Dolores Delgado y llevada a cabo por la Unidad Antiterrorista de la Guardia Civil, por su presunta vinculación con la organización terrorista DAESH.
Según la Guardia Civil, uno de los detenidos, nacido en Melilla, actuaba como cabecilla de esta red. Dirigía sus actividades según la doctrina de DAESH, centrándose principalmente en la captación de mujeres, aunque también participaba en la captación de otros grupos. El sospechoso contactaba con jóvenes de diferentes regiones de España a través de las redes sociales, estableciendo una estrecha relación con ellos e invitándoles posteriormente a grupos privados de WhatsApp con el fin de crear un diálogo directo y dinámico y, como resultado, ganarse su fidelidad.
La propaganda que difundieron los dos hermanos incluía una "fatwa" en español que justificaba doctrinalmente el martirio al tiempo que fomentaba la mayor influencia posible en los países.
En cuanto a los dos detenidos en Cataluña, uno de ellos, nacido en Marruecos y detenido en Barcelona, se encargaba de editar y distribuir material destinado a reclutar nuevos miembros de DAESH. Utilizaba elaborados mecanismos para ocultar sus actividades a los investigadores.
El segundo detenido en Cataluña predicaba -por su profunda interiorización de las reivindicaciones más radicales de los yihadistas- que la aplicación de la "sharia" justifica matar a quienes se oponen a ella. Además, glorificaba los actos de martirio, lo que le situaba en lo alto de la lista de potenciales amenazas para llevar a cabo acciones terroristas.
